sábado, 26 de noviembre de 2011

Capítulo 8 – El Poder de la Empatía

Es posible afirmar que la empatía es un sentimiento y/o una sensación de comprensión, agrado y afecto que sucede entre dos o más personas. La empatía surge entre las personas que se escuchan y se entienden, no hay que ser amigos para tener empatía, basta simplemente con conocer a alguien y escucharle. Así es como inicia este capítulo con el arte de escuchar y prestar atención a los que los demás tienen que decir. “Oír” es recibir sonidos, todos los días oímos pájaros cantar, carros pasar, profesores hablar, niños jugar; pero “escuchar” es tener la disposición intencionadamente de prestar atención y concentrarnos para recibir con empatía la información que se nos brinda. Menciona Carl Rogers que existe empatía “…cuando alguien te escucha sin juzgarte, sin tratar de responsabilizarse de ti ni querer cambiarte, cuando soy capaz de percibir el mundo de una manera nueva y seguir adelante…” Solo el hecho de que alguien nos escuche resulta tan maravilloso que las cosas que no parecían ser irremediables, de repente brotan varias soluciones. Aveces no se necesitan palabras de aliento, escuchar da la oportunidad para quien quiera liberar sus emociones sea atendido. “Decimos mucho” cuando escuchamos los sentimientos de los demás.

La Comunicación No Violenta se enfoca en reforzar la capacidad de conectarse empáticamente con los demás. Es importante romper barreras de jerarquía para tener empatía no importa el status económico, social o cultural que se tenga, debe existir empatía con todos aquellos alrededor nuestro. Es más difícil empatizar con aquellas personas que parecen tener más poder o recursos. La solución que CNV ofrece es vernos como iguales, porque si suponemos que en una relación hay superiores vamos a ponernos o a la defensiva o a disculparnos en lugar de establecer  una relación empática con ellos.

Si bien es cierto que manifestar nuestros sentimientos y mostrar nuestras necesidades más profundas es un tema muy complejo, el hecho de poner en práctica la conexión empática con los demás lo facilita todo, puesto que ya nosotros como el otro habremos creado una contacto humano y nuestra parte más personal y vulnerable va a ser compartida recíprocamente. De ahí nace la seguridad. Cuanto más empaticemos con el otro, más seguros nos sentiremos.

La empatía puede ser empleada en momentos de peligro para neutralizar la violencia potencial. CNV no propone suprimir de nuestro vocablo la palabra “pero” con personas violentas, puesto que esta ofrece una barrera de excusas y una incomprensión que en momentos tan peligrosos nos ayudan. Hablar naturalmente y tener empatía mostrando compresión y dando una oportunidad de refugio y consuelo es la respuesta indicada. Hay personas que a primera vista parecen monstruos, pero en realidad son seres humanos cuyo lenguaje y comportamiento nos impiden ver su humanidad interior. Cuando el otro recibe mi empatía, las probabilidades de que nos libere y nos haga salir de ese momento difícil.

¿Cómo utilizo la empatía en una conversación sin vida? Ciertamente las conversaciones de vez en cuando agotan su vitalidad, esto sucede al uno de los presentes se desconectan de los sentimientos y necesidades del otro por infinitas causas. El problema es que la gente no comprende que necesita empatía del otro, dejar el orgullo cuesta per debe ser fundamental para tomar una actitud empática, tampoco entienden de que es más probable que reciba agrado y comprensión al expresar sus sentimientos y necesidades actuales que contando sus penas, injusticias del pasado. Una persona que solo se queje y no de propuestas de vida que no se muestre necesitada de los demás no es más que un estorbo y un aburrimiento para la sociedad. Se requiere animar una conversación expresando nuestro deseo de una mayor conexión con el otro. Es aquí donde entra en juego la “interrupción”. Basta con sacar la valentía para interrumpir en medio de una frase a una persona cuando habla. El que habla prefiere ser interrumpido, y no que los otros simulen escuchar. Cuando hablamos todos pretendemos enriquecer a los demás a través de nuestras palabras, no ser unos pesados.

Enfrentarse con la realidad no es tan malo como puede parecer. Da miedo y nos cuesta mucho pero es indispensable entrar en contacto con los otros. Hay que ser conscientes de que hay cosas que se necesitan sacar y hacer por cuenta de sí mismo. Una solución muy aceptada es compartir lo que me pasa con otras personas.

Sistemas II nos ha hecho conscientes de la importancia que tiene la empatía. En este capítulo es muy fácil de relacionar por las múltiples relaciones empáticas que se crearon. Al principio pocos daban por interesante el curso. Al contrario ha sido visto como algo aburrido y lógico pero el curso conforme fue avanzando se convirtió en una clase de conexión con uno mismo, con los compañeros y con la forma en la que percibimos nuestra realidad. A nivel personal, la empatía surgió primeramente con el profesor, esto sucedió cuando puse de mi parte y dejé de oír y me dispuse a escuchar el mensaje, si bien es cierto al principio costó, utilice sin querer queriendo métodos del CNV, puesto que no dije nada, el silencio y la recepción de información fue el primer paso que di, seguidamente empecé a participar en clase formulando mis dudas y viviendo el mensaje, si algo no me parecía interrumpía sin ser pesado para mostrar interés con el profesor. La segunda relación empática la tuve con los compañeros donde superé barreras de edad (caso de don Francisco) de género (Pamela, Sofía, Daniela entre otros) y de personas que ya estudiaban Derecho desde antes (Josué) y de manera persona me dispuse a compartir con ellos vivencias de diario y compartir una buena relación. Al final me convencí de que poner en práctica la empatía me hizo sentirme presente, importante, y logré transmitir ese mensaje con los demás.

No nos fijemos en las diferencias y propogamos relaciones empáticas
con los demás superando barreras y mostrando comprensión, agrado y afecto.

sábado, 19 de noviembre de 2011

¿Qué es una Crisis de Conciencia?


Es difícil expresar tanto malestar que existe en el mundo. Cada día vivimos bombardeados de malas noticias, que unos mueren, que la economía está en crisis, que los políticos no cumplen sus promesas, que estafaron, que robaron, que hirieron y así se podría seguir describiendo tantas cosas malas que se viven. Pero a pesar de todo esto la vida sigue, el mundo es activo y no podemos desligarnos de la idea de seguir adelante con nuestras vidas. Pero ¿qué sucede cuando una de las cosas que están malas en la sociedad es la sociedad misma? Aclaro, no en el tanto y cuanto la sociedad es mala sino que está enferma. Está desunida, está fraccionada, dividida por factores sociales, económicos, culturales, axiológicos, religiosos, lingüísticos, entre otros. Entonces donde está claro que somos muchas partes esparcidas por el mundo, ¿quién nos recuerda que somos una sola raza humana, que vivimos en un solo planeta común? La respuesta es NADIE. Muchos lo proponen, pero sus esfuerzos por hacer pública su idea fracasan porque la mayoría gana y muchos prefieren al mundo divido.

Es aquí donde encontramos una crisis de conciencia. Podemos evidenciar muchas actitudes de los hombres y las mujeres que ocasionan que seamos indiferentes ante millones de situaciones que se presenten a diario. Primeramente, la indiferencia. Es ese “no es conmigo” que nos ha alejado del prójimo. Jesús mismo lo dijo ama a tu prójimo, y no se refería solo a la pareja o a la familia, sino a todo aquel que esté más próximo a uno. pero aunque lo sepamos (los cristianos) muchos no lo ponemos en práctica y así suele suceder con otros credos. Vemos a un indigente y si acaso sentimos lástima por él. Por factores económicos creamos clases donde nos unimos a una clase en específico llámese adinerada o pobreza y nos creemos superiores o inferiores. En cuanto a la cultura nos vemos como razas, en qué grupo estamos desde que nacemos y nos separamos por razas. Si bien es cierto que somos personas diferentes la unificación y la integridad humana nos ayudan a prevenirla indiferencia.

Esta crisis es una programación negativa donde en segundo lugar podemos ubicar el individualismo donde todo es para mí y solo para mí y si sobra algo que también sea para mí. Creemos que somos los únicos que habitamos en el mundo y que debemos ser aptos para estar bien en comparación a los demás. Ignoramos que 50% de la población mundial vive 1 día con menos de $2. Creemos que el materialismo y tener por tener es la clave del éxito, la superación de barreras económicas es a través de cuento tengo y el “ser” se convierte en “tener”. No es que queramos un mundo corriente y en decadencia, pero el alrededor no me interesa si yo estoy bien, pero nuestra conciencia se ve influenciada por el egoísmo y falta de amor y consideración hacia el otro.

No todo está perdido. Como mencioné anteriormente el mundo sigue, y el futuro está en manos de los seres humanos. la solución es la integración y la unificación al medio. No hablo de abrazar plantas di de hacer una campaña de abrazos gratis solo me refiero a la concientización de que somos una sola mente, que aunque busca cumplir objetivos y fines diferentes debe permanecer unida. La mente individual debe crear confianza en la creación de una capacidad mental global de realizar una programación positiva y aunque suene utópico, como no se ha intentado no puede decirse que es imposible. 


miércoles, 2 de noviembre de 2011

Los dioses deben estar locos




Ser humano civilizado en comparación con la salvaje, tranquila y natural convivencia de un poblado bosquimano en el aislado desierto del Kalahari, Sudáfrica. La vida de estos pobladores, con sus tareas tradicionales y juegos infantiles, transcurre en plena felicidad y armonía, no tienen sentido de la pertenencia, no son egoístas.

En Kalahari un buen día, cae del cielo un extraño objeto (una botella vacía de Coca-Cola tiró un piloto desde una avioneta) que perturba problemáticamente la convivencia entre los integrantes de la tribu. Por otro lado vive el hombre de la ciudad donde el que se rehusó a vivir en grandes ciudades prefirió la naturaleza de la sabana, ahí recibe a una maestra de inglés proveniente de América del Norte y por más que trata de conquistarla solo “tortas” comete y no logra ni una. Una maestra se preocupa por la situación académica de los estudiantes africanos que no tienen una buena educación. Dentro de la misma civilización se encuentra las luchas de poder donde se evidencia al gobierno y a un grupo de manifestantes armados.

En un momento de la película todos los personajes se ven relacionados y aun así sus preocupaciones y sus sistemas de creencias se alteran pero no varían sustancialmente. A un bosquimano  la vida se complica por una botella, para el hombre civilizado la vida se complica por el uso de la tecnología y por el trato que tiene una mujer. Mientras que la mujer se complica por la situación de los estudiantes en África cuando los manifestantes los secuestran, y lo secuestradores se preocupan por quitar del poder al presidente. Y el gobierno busca la manera de preservarse en el poder.

Cada uno de los personajes tiene sus propias percepciones de la vida, lo que para un hombre resulta irrelevante (la botella) para un bosquimano representa lo maligno y algo que puede ser causante de separación de su comunidad. Y viceversa, lo que para un hombre significa la cárcel para el bosquimano no significó nada, es más, nunca llega a comprenderlo. No hay forma de explicar eso. El idioma no es la barrera principal en el entendimiento de las cosas sino el sistema de creencias es lo que ocasiona una marcada diferencia en las formas de ver las cosas.

Entonces surge la pregunta: ¿las cosas son o simplemente les damos un significado propio? Pues las cosas no “son” ni “no son”. Simplemente están ahí a nuestra vista, y por las cualidades  de querer explicarlo todo que tiene el hombre se decidió socialmente darle un significado común que fuese legitimado. Aclaro es el mismo hombre en sociedad que cree su propio sistema de creencias, de ahí que la película brinda una propuesta muy relacionada con el objetivo de ser investigador. Para un investigador su principal objetivo es la búsqueda de la verdad, se podría discutir de si es verdad es ciertamente la única y válida o si está simplemente aceptada por una mayoría social. Entonces se propone apartar lo que individualmente o socialmente creemos para descubrir una verdad “más allá” es decir una verdad que sobrepasa entendimiento humano simple. Se trata de romper paradigmas y llegar a lo próximo, no es restringirse, no es limitarse; al contrario es reconocer que estamos limitados por percepciones propias, y saber lidiar con ellas, para superarlas, y llegar a un estado de “open mind” donde no influyan en el investigador límites para realizar su labor.